Transcripción:
  • ENTREVISTADORA: Vale, muy bien, pues hemos llegado a la parte que te anunciaba al principio que te voy a pedir que, si quieres que me cuentes una situación, algo concreto que ocurrió en los últimos tres meses y tú te sentiste bien. Luego te haré unas preguntas relacionadas con la lengua.
  • PARTICIPANTE: ¿Y me sentí bien?
  • E: Sí.
  • P: Algo que… Bueno pues me acaba de dar una una subida de sueldo, hala, que me sentí muy bien.
  • E: Ay, ¿sí?
  • P: Sí. Fenomenal.
  • E: Y si tienes que ponerle palabras a qué sentiste, ¿qué me dirías que sentiste?
  • P: Pues como no me lo esperaba y los tiempos que corren y aparte en un trabajo nuevo porque acabo de… llevo solo siete meses, eh vengo de una empresa que tuvo que reorganizar tuve que repensármelo todo, buscar trabajo en pleno corona, pues… pues sí. Más de lo que yo esperaba en… hace un año, cuando yo miro mi situación hace un año. Muy agradecida.
  • E: Sí. Jo, enhorabuena. Además, qué rápido, qué bien (risas). ¿Y te sentiste bien hacia ti misma o hacia otras personas?
  • P: Eh hacia mí misma también y hacia mi marido porque dije mira pues hombre, ya tenemos nuestra edad ya ya ya ya ya ya ya las necesidades o la la situación económica es diferente porque llevo muchos años trabajando ya la hija está fuera de casa y dijo pues oh pues me lo voy a gastar. Ya verás cómo me lo gasto. Me lo voy a disfrutar.
  • E: Y en… mira, te voy a hacer ahora una pregunta sobre el nivel de tensión. A ver, en muchos momentos en nuestra vida sentimos tensión, pero a veces es agradable como… yo pongo el ejemplo de cuando nuestro equipo de fútbol marca un gol, estás en tensión, pero es agradable, entonces pensando que…
  • P: Un partido de fútbol. Del Zaragoza.
  • E: Claro, pues pensando que la tensión puede ser agradable o desagradable cuando te subieron el sueldo, ¿tú sentías tensión entre un uno nada y un siete mucho? ¿Cuánta tensión sentías?
  • P: Un seis.
  • E: Un seis.
  • P: Tampoco… A ver, sigue siendo un número, ¿eh? Yo llevo muchos años en esta vida profesional, o sea que tampoco no me hago…
  • E: Y en ese momento, no ahora, sino en ese momento, cuando te lo dijeron, ¿cómo fue de importante para ti, también entre un uno y un siete?
  • P: ¿Importante? Yo creo que no le di más importancia de lo que es. O sea, estoy agradecida y estoy muy sorprendida, pero, ¿que no me quitas el sueño? No. Ponle un cinco.
  • E: Un cinco. Muy bien cuando te te lo contaron, ¿estabas en casa o fuera de casa? ¿Perdón?
  • P: En el trabajo.
  • E: En el trabajo.
  • P: En la oficina.
  • E: ¿Y con quién con quién estabas con belgas, había belgas?
  • P: Había belgas. Yo no, yo no lo comenté con nadie, ¿eh?
  • E: Eso es lo que te voy a preguntar ahora, si, si expresaste lo que sentías.
  • P: No, es que aquí a nivel sueldo, al menos en las empresas donde yo he trabajado y es una ética mía, yo nunca nunca hablo con de mi sueldo con mis compañeros, nunca.
  • E: Pero tú cuando te lo contaron estabas con alguien, o sea, ¿o recibiste un email?
  • P: La base de un contrato que me dieron y que tuve que firmar y vi la cantidad, no sé… Porque yo estoy firmando contratos de mes a mes porque estoy en un tipo de ETT para profesionales freelance. O sea, yo… Sí, fue algo muy raro.
  • E: Vale, eh bueno, te voy a hacer las preguntas y si puedes respondes y si no, no. Entonces, ¿hablabais en algún idioma con con esta persona con lo del contrato o no o no había nadie con quien hablar?
  • P: No, no.
  • E: Vale, entonces, no expresaste lo que sentías porque no estabas hablando con nadie.
  • P: A ver, lo expresé después cuando llegué a casa.
  • E: Eh. Y cuando llegaste a casa, con quién hablaste, ¿con tu marido?
  • P: Sí.
  • E: Y ahí, este, ¿se lo contaste en castellano o en neerlandés o los dos?
  • P: En castellano. Normalmente nosotros al 90% en casa, si estamos dentro de los muros de la casa, el 90% hablamos castellano, solemos hablarnos en neerlandés sobre todo cuando estamos fuera, cuando estamos de viaje… Pero en casa es 90% castellano.
  • E: Sí. ¿Y a él le expresaste lo que sentías y expresaste lo que sentías como lo sentías, más o menos, o tal como lo sentías?
  • P: Más.
  • E: Bueno, con él entiendo que en ese momento tenías una relación muy cercana. Y tu posición o rol social en ese momento con respecto a él de igualdad de superioridad o de inferioridad?
  • P: Igualdad.
  • E: Igualdad. Vale, pues antes de pasar a la siguiente situación te voy a hacer una pregunta que no tiene nada que ver que es a qué hora cuando no trabajas el fin de semana o los días libres, ¿a qué hora sueles comer a mediodía?
  • P: El fin de semana solemos llevar horario español (RISAS). Entre que nos acostamos tarde, nos levantamos tarde… Normalmente el fin de semana solemos comer entre… a partir de las dos y cenar a partir de las ocho.
  • E: Vale.
  • P: Entre semana no, porque claro…
  • E: Claro, si estás trabajando, no se puede elegir a veces…
  • P: Pero después en cuanto que llegamos a España y desde el primer día con esa cambiamos el chip para el horario español sin ningún problema.
  • E: Ah, qué bien, a mí me cuesta (RISAS).
  • P: Ah, no, no, no. Yo ahora el sábado llegaré a Alme… no, no, yo no tengo ningún problema para cambiar el chip.
  • E: Qué bien. Pues ahora te voy a… yo estoy siempre comiendo aquí y allí… ya no tengo horas. A ver, te voy a preguntar por la situación. Vamos, que pienses en otra situación también algo que ha ocurrido en los últimos tres meses y te has sentido mal. Eh, que me la explique si puedes y te voy a hacer las mismas preguntas.
  • P: Que me haya sentido mal… Se ve que soy bastante feliz.
  • E: (RISAS)
  • P: Pues sí, un chico que estuvo aquí el año pasado con nosotros, que estuvo de Erasmus, estuvo aquí en casa de nosotros y después se fue dudando si iba a volver o no pa hacer un máster. Y mientras tanto yo la habitación, porque siempre tenemos una habitación para un estudiante de intercambio, eh, mientras tanto se la apalabré a otra chica. Se lo comuniqué, bueno él este verano me dijo ah por fin he decidido volver y dije lo siento, pero la habitación ya está ocupada, me dijo no pasa nada, me busco la vida. Y cuando llegó aquí a finales de septiembre me llamó y había y era un timo. Tuvimos que acogerlo en casa temporalmente porque yo no podía tenerlo más tiempo y se ha ido este fin de semana.
  • E: Ostras.
  • P: Sí, tremendo. Tremendo, tremenda situación.
  • E: Ya… Madre mía. Eh, te voy a hacer las mismas preguntas que antes. Qué palabras, o sea, qué emociones, si puedes ponerle palabras a esas emociones que sentiste.
  • P: Rabia, rabia y una una vergüenza fuimos a poner la denuncia, pero bueno, lógicamente no sirve de nada. Rabia y empotencia porque sabes que el mercado es lo que es sobre todo aquí en (-) los más débiles los estudiantes los que no entienden. Mucha rabia. Esto lleva muchos años así y no hay manera de de cambiarlo. Mucha rabia.
  • E: Jo. Ya, yo he tenido suerte, hasta ahora. Menos mal. Eh, ¿te sentiste mal hacia ti misma o hacia otras personas?
  • P: Hacia mí misma porque quieras que no estás orgullosa de tu ciudad de adopción o como lo quieras llamar y a ver, y es una preciosa ciudad y me encanta que vengan muchos estudiantes y que les den oportunidades a mucha gente, pero sí me cabreo y me enfado porque sé que la situación no está en equilibrio, de oferta y demanda, y que siempre son los mismos los que van a… los que sufren.
  • E: Sí. Y en este momento también igual que antes entre un uno y un siete, ¿cuánta tensión sentiste?
  • P: Hombre, como el chico ya había estado hacía un año con nosotros y no tenía donde caerse muerto, pues te afecta, sí, hombre, pero diría que seis, sí que, sí que me afecta, vamos. Estuvimos un año conviviendo con él y estuvo ahora otra vez un mes entero con nosotros hasta que encontramos en la solución sí, un seis.
  • E: ¿Y en ese momento como fue de importante para ti entre un uno y un siete también? ¿Un seis, o más o menos?
  • P: Seis, seis, sí.
  • E: Esta… eh… vamos a fijarnos en algo concreto para las siguientes preguntas. No sé si cuando él te lo comentó o en otro momento.
  • P: Pues a ver, (-) ¿Dónde duermo esta noche? Ya ves tú…
  • E: Ya. ¿Tú estabas en casa?
  • P: Sí, me había llamao anteriormente, pero que tenía el teléfono en volumen bajo y me llamó. Sí, pues justo justo acaba de llegar a casa de la oficina.
  • E: Y el chico es belga, no es Erasmus.
  • P: Español.
  • E: Es español. ¿Y estabais hablando en español?
  • P: Sí.
  • E: ¿Expresaste lo que sentías en ese momento?
  • P: Sí, sí.
  • E: ¿Y expresaste lo que sentías igual, tal cual lo sentías o más o menos?
  • P: No, tal cual.
  • E: Y tu relación en ese momento con él dirías que era muy cercana, medio cercana o nada cercana.
  • P: Hombre, muy cercana, porque es un chico que ha estado aquí un año con nosotros y que te llama… Y que se ve en la calle, pues…
  • E: Claro.
  • P: Sí.
  • E: ¿Y tu posición o ron social en ese en esa situación con él sería de igualdad de superioridad o de inferioridad?
  • P: Hombre, en este caso ya era un poco de superioridad porque a ver era darle consejos, guiarle hasta casa, preparar una habitación como puedes… A ver, aquí era él el que necesitaba de nosotros, eso sí es verdad.
  • E: Sí.

 

……………………………………………………………………………………………………

CÓDIGOS

E = Entrevistadora

P = Participante

(-) = Se ha anonimizado

(XXX) = No se comprende

(RISAS) = Risas

(:palabra) = Palabra que pensamos que el participante quería decir

(*) = Palabra, expresión o frase en otra lengua

… = Palabra cortada / Frase cortada / Puntos suspensivos

Categorías:

Tipo de corpus: Hablantes de herencia
Tipo de muestra: Oral
Lengua del corpus: Español
Lengua materna: Español
Tipo de texto: Dialógico
Género de la muestra: Conversación / Respuesta
Condición de la muestra: Estimulada
Condición de estudio: Herencia
Sexo: Mujer
País de recogida de datos: Bélgica (contexto neerlandófono)